El político de oposición, Marko Cortés, dijo que México se acerca a los 150,000 homicidios dolosos por la violencia criminal, un lamentable récord histórico respecto a los anteriores gobiernos
El político de oposición, Marko Cortés, dijo que México se acerca a los 150,000 homicidios dolosos por la violencia criminal, un lamentable récord histórico respecto a los anteriores gobiernos

El fracaso del gobierno de Andrés Manuel López Obrador ante el crimen organizado, como lo cataloga el bloque de oposición del Partido Acción Nacional, abre la necesidad de apoyo de Estados Unidos en el combate.

En palabras del presidente del PAN, Marko Cortés Mendoza, dijo criticó desde su punto de vista el falso discurso de la soberanía nacional, por lo que “debe reconocer su rotundo fracaso en materia de seguridad, corregir y retomar de manera inmediata la necesaria colaboración con la DEA para combatir a los cárteles del narcotráfico que generan muertes, violencia e intranquilidad en las familias mexicanas”.

Asimismo, el dirigente panista exigió al Presidente acciones contra la delincuencia organizada para evitar el “banquillo de los acusados, como Genaro García Luna”.

“Los analistas del gobierno y el Congreso estadounidense, agregó, saben muy bien que los resultados de este gobierno son mucho peores que en el pasado, que la administración de López Obrador es la más sangrienta y permisiva en la historia moderna, que la política de los abrazos”, explicó.

Por lo tanto, insistió que López Obrador debería escuchar a los funcionarios de Estados Unidos, “y retomar con seriedad la necesaria colaboración de la DEA para evitar se sigan incrementando las pérdidas humanas en ambos países”.

“Debe hacerlo a tiempo, si quiere evitar la posibilidad de que, en un futuro cercano, en Estados Unidos, lo pongan en el banquillo de los acusados al menos por su indolencia frente al crimen organizado, como pusieron a García Luna”, dijo Marko Cortés.

Además, resaltó expresiones como las del fiscal general de Estados Unidos, Merrick Garland, quien dijo ante el Senado que México podría hacer mucho más para combatir el tráfico de fentanilo, mientras que la directora de la DEA, Anne Migram, se quejó de una cooperación insuficiente de México en el intercambio de información sobre fentanilo y precursores químicos.