Acatará las órdenes de los jueces, aunque sean violatorias de derechos, dijo el presidente de la República.

Una vez más, la conferencia de prensa de este lunes 14 de agosto de Andrés Manuel López Obrador se centró en el tema de la disputa del presidente de la República con el Tribuna Electoral del Poder Judicial de la Federación por lo que dijo sobre la senadora y precandidata a la presidencia Xóchitl Gálvez.

Ello ocurrió en el contexto de una carta de apoyo que los 22 gobernadores afiliados o vinculados a la coalición electoral del presidente expresaron su insatisfacción con los que ven como obstáculos al derecho de expresión del presidente  López Obrador.

Como ya es costumbre, López Obrador se dijo enemigo de que se impongan límites a su capacidad para criticar desde su espacio a otros, aunque se niega a dar a otros la posibilidad de defenderse de las acusaciones que formula.

Se dijo partidario de “que no se limite a nadie el expresarse, el manifestarse” y remató con un estribillo que ya ha usado en ocasiones previas: “¡libertad, libertad, libertad!”, al que agregó uno tomado de las marchas de los movimientos de los sesenta del siglo pasado: “prohibido prohibir”.

Según él, “corresponde a estos organismos que vienen del antiguo régimen y hay que respetar sus decisiones, aun cuando sean francamente violatoria de derechos constitucionales”.

En ese sentido, aprovechó la disputa por sus dichos sobre la senadora Xóchitl Gálvez para atacar también a José Ángel Gurría, quien redacta el documento que servirá como plataforma del Frente Amplio por México, al tiempo que insistía en la idea de “limpiar de corrupción al Poder Judicial”, por lo que volvió al tema de que se elija por voto popular a los jueces.

Debe destacarse que a Gurría le cuestionó por su papel en la coalición que integran los partidos Acción Nacional, Revolucionario Institucional y de la Revolución Democrática, pero cuando una reportera presente en la conferencia le preguntó acerca de los vínculos de la esposa de Gurría con una de las empresas que operan en la zona de influencia del Tren Maya, eludió la pregunta de fondo sobre el futuro de la península de Yucatán en materia de protección ambiental.

López Obrador se limitó a criticar al exsecretario de Hacienda y de Relaciones Exteriores por su papel en el manejo del Fondo Bancario de Protección al Ahorro, el así llamado Fobaproa, de finales de los noventa.

En lo que hace a la disputa por los Libros de Texto Gratuitos dijo que acatará la orden del ministro Luis María Aguilar y suspenderá la distribución de esos materiales en Chihuahua.

Dijo que ahí, “una autoridad local, actuando de manera irresponsable, con fines politiqueros, y mostrando su conservadurismo extremo, presentó una controversia en la Suprema Corte de Justicia de la Nación y un ministro deshonesto, que me consta que es así y adversario nuestro, resolvió que no se distribuyan los libros.”

Agregó que “por culpa de estos reaccionarios se van a quedar los niños de ese estado sin libros.”

Hizo un llamado a que los padres de familia en Chihuahua opinen, “sería extraordinario porque hay manera de que conozcan los contenidos en las redes.”

Remató diciendo que “donde no haya amparos sí se van a distribuir”.